Análisis con indicadores a partir del uso de Balanced Scorecard

Indicadores
Un caso especial de análisis es la aplicación específica de las correlaciones para el establecimiento de relaciones causa-efecto a través de Balanced Scorecard.
Un caso especial de análisis es la aplicación específica de las correlaciones para el establecimiento de relaciones causa-efecto a través de Balanced Scorecard.
En el artículo anterior, iniciábamos una lista de las funciones que ha de asumir la gerencia de gestión de la estrategia corporativa. Se trata de un sector dentro de la organización que se encarga de todo lo relacionado con la implementación y mantenimiento del modelo Balanced Scorecard, también conocido como Cuadro de Mando Integral.
La gestión estratégica es un asunto que no debe tratarse a la ligera si se aspira, como es de sentido común, a obtener resultados tangibles de ella. Los líderes de la estrategia o la gerencia de gestión estratégica, también conocida como GGE, es una figura encargada de garantizar el logro de los objetivos y de poner en marcha la planificación de la estrategia.
El Business Intelligence, traducido al castellano «Inteligencia Empresarial», es un término que se emplea para referirse al uso de datos en una organización para optimizar la toma de decisiones. Se trata del análisis de estos mediante el uso de un conjunto de herramientas y estrategias.
En el artículo anterior, nos hacíamos la siguiente pregunta: ¿Por qué fracasa mi Plan Estratégico?. En línea con esto, hoy expondremos la teoría de las 5 P de la estrategia. Antes de poner en marcha el plan de estratégico de una empresa, es conveniente conocer de qué formas se puede relacionar nuestro plan con otras concepciones de la estrategia, pudiendo enriquecer de esta forma nuestra gestión de la misma.
Como venimos haciendo semanalmente, dedicaremos el post de hoy a acercarnos un poco más al ámbito de la gestión estratégica y a mostrar cómo obtener un buen rendimiento de la inversión que hacemos en estrategia.
En las organizaciones surgen ideas innovadoras que no siempre llegan a buen puerto, es decir, no llegan a implementarse. Las operaciones diarias, la falta de compromiso y otros factores, dificultan que las ideas lleguen a implementarse. Uno de los grandes retos a los que se enfrentan las organizaciones que plantean un Cuadro de Mando Integral o Balanced Scorecard, es precisamente este: la ejecución estratégica.
Cuando una organización decide poner en marcha una estrategia, emprende un camino con un punto de inicio concreto. No ocurre lo mismo con el fin: la estrategia es algo vivo, que se revisa y adapta periódicamente. Por lo tanto, no existe un fin del camino como tal. Lo que sí existe es una serie de pasos secuenciales que están presentes en toda gestión estratégica.
En el artículo anterior, hablábamos de una realidad que afecta a todas las organizaciones que deciden poner en marcha una estrategia. Comenzábamos con este impactante dato: La ejecución de la estrategia fracasa, nada menos, que en un 90% de las ocasiones.
Por desgracia, numerosos recursos (financieros, humanos y de todo tipo) invertidos en estrategia no tienen ningún retorno. Un artículo publicado por la revista Fortune en el año 1999, arrojaba este alarmante dato:
«Menos del 10% de las estrategias formuladas correctamente, son ejecutadas con éxito».