Saltar al contenido principal

Benchmarking, una herramienta para alcanzar la excelencia

Inicio / Benchmarking, una herramienta para alcanzar la excelencia

El enfoque analítico del Benchmarking

Benchmarking es un enfoque estratégico que consiste en analizar las prácticas exitosas de otras compañías y adaptarlas a las necesidades de cada caso. El objetivo principal es generar cambios dentro de las empresas para aumentar los niveles de competitividad dentro de un marco de buenas prácticas y cooperación.

Mentiras y verdades sobre el Benchmarking

El Benchmarking ha sido definido y aplicado de muchas maneras. Desde que el término irrumpió en la práctica corporativa hace unos años, son muchas las compañías que lo han puesto en marcha en sus respectivos sectores.

Haz click aquí y descárgate la guía gratuita: Los Modelos de Excelencia en  Latinoamérica

En esencia, se trata de una herramienta analítica que ayuda a la mejora de los procesos internos de las compañías para generar ventajas competitivas. Y lo hace fijando la vista en aquellas empresas que lideran sus respectivos sectores o que han logrado desarrollar un proceso exitoso que merezca estudio.

Sin embargo, muchos aún reducen el Benchmarking a un mero ejercicio de espionaje a la competencia. Creen que consiste en copiar métodos exitosos para luego aplicarlos a sus respectivos procesos. Nada más lejos. De hecho, si de eso se tratara, nadie tendría ventajas competitivas porque todos las habrían copiado de todos.

Características y aplicación del Benchmarking

No hay nada más absurdo que implementar algo que la competencia ya tiene. Cuando se habla de una ventaja competitiva, se trata de buscar elementos que marquen la diferencia y agreguen un valor añadido a los productos o servicios. De lo contrario, no habrá distinción alguna entre las marcas.

El Benchmarking busca soluciones en otro sentido. Por ejemplo, centrando la atención en compañías que nada tienen que ver con el sector en el que opera una empresa, pero de cuyas soluciones se pueda sacar algo en claro. Los dos conceptos claves para llevar a la práctica un proceso eficaz de benchmarking son los siguientes:

  • Área de interés: se refiere a aquello en lo que las empresas quieren mejorar o implementar soluciones para aumentar su calidad.
  • Mejores prácticas: aquellas que sirven de referencia para otras compañías. No se deben confundir con las prácticas de las empresas rivales, aunque puede que algunas veces coincidan los dos factores.

Un ejemplo de Benchmarking en estos términos lo encontramos en una farmacia que quiere mejorar sus tiempos de entrega a domicilio. Fijarse en cómo lo hace la farmacia de enfrente no tiene mucho sentido, con lo cual recurre a la pizzería del barrio, cuyo servicio de domicilio se caracteriza por su puntualidad y eficacia.

En este caso, la farmacia ha aplicado una práctica exitosa de una empresa que no forma parte de su sector. Y no importa que no lo sea. Lo esencial radica en la adaptación de dicha práctica a la entrega de medicamentos a domicilio.

En la actualidad, muchas empresas hacen públicos sus procesos de calidad o también llamadas «mejores prácticas», pues consideran que esto ayuda a que otros, incluso las compañías de su competencia, garanticen la sostenibilidad del sector.

Antes de emprender un proceso de Benchmarking, es fundamental haber realizado una investigación en la que figuren aquellas fuentes que aporten valor a lo que se quiere conseguir. Las empresas pueden apoyarse en centros de estadística, organizaciones y agremiaciones que publiquen periódicamente documentos específicos.

Los diez pasos básicos para un Benchmarking son:

  • Identificar el área de interés sobre el que se quiere mejorar.
  • Definir las compañías que tengan las mejores prácticas de esa área de interés.
  • Identificar indicadores de medición.
  • Analizar el método para la recolección de datos.
  • Medir la discrepancia entre la proyección y la situación real de la empresa.
  • Proponer niveles de desempeño
  • Fijar las metas y tiempos de la implantación de las soluciones.
  • Ejecutar la integración de las nuevas prácticas.
  • Medir los resultados del proceso.
  • Definir una periodicidad para la implantación de las mejores prácticas.

La importancia de la Evaluación de Resultados

Igual o más importante que los procesos en sí mismos, la evaluación de los resultados es un paso fundamental dentro de las estrategias corporativas o los planes de empresa. De ella depende la valoración que hagamos de las tareas propuestas, además de ser el primer indicador de referencia para la implementación de soluciones.

Con ISOTools puedes hacer más eficaces las labores de evaluación. La plataforma digital te da la opción de acceder a numerosas herramientas de comparación y compartición de buenas prácticas en busca de la excelencia.

-

¿Desea saber más?

Entradas relacionadas

Volver arriba