La Comisión Europea está trabajando para unificar los etiquetados ambientales y conseguir que los consumidores puedan elegir los alimentos con menor impacto en el planeta.
Hoy por hoy, las organizaciones deben innovar continuamente su metodología operativa para garantizar la mejora continua de sus procesos, la calidad de sus productos y maximizar su competitividad en el mercado. Para poder dar cumplimento a todas sus obligaciones la familia de Normas ISO ofrece varios estándares que, implementados en conjunto, sin duda alguna, permiten el alcance de los objetivos estratégicos, optimizan el desempeño, el alcance de las expectativas en termas de calidad y seguridad de toda la cadena alimentaria.
El Análisis de Peligros y Puntos de Control (APPCC)es un instrumento que faculta la posibilidad de realizar evaluaciones de peligros y crear un sistema de control ajustado de tal forma que permita la prevención. Se puede aplicar en toda la cadena alimentaria, desde la elaboración y fabricación, incluyendo la transformación, envasado, almacenamiento, transporte, distribución y manipulación, hasta la fase final que corresponde con la venta al consumidor, fuente Anexo al CAC/RCP-1 (1969), Rev. 4 (2003).
La Norma ISO 22000 es una norma global de Sistemas de Gestión de Seguridad Alimentaria, desarrollada por la Organización Internacional de Normalización. Se aplica en todas y cada una de las etapas que forman la cadena de suministro, desde los agricultores y ganaderos, a la siguiente etapa de procesado, envasado, transporte y venta. Además, incluye a otros proveedores y agentes.
Las empresas de la industria alimentaria de primera necesidad deben adaptar sus procesos de producción, manipulación, envasado y transporte, a las leyes de los países de destino para que todo el proceso de exportación se desarrolle conforme a los objetivos fijados por la empresa. Este hecho, que puede parecer una difícil misión, se simplifica de manera considerable con la adopción de un estándar reconocido a nivel internacional.
La Norma UNE-EN ISO 22000 2018 identifica los requerimientos que debe cumplir el sistema de gestión de una organización para garantizar la seguridad de los alimentos en toda la cadena alimentaria hasta el consumidor final.
Las siglas FSSC proceden de la traducción en inglés de Food Safety System Certification. La FSSC 22000 es un esquema de certificación de Gestión de Seguridad e Inocuidad Alimentaria, gestionado por la Fundación para la Certificación de Seguridad Alimentaria (Foundation for Food Safety Certification) y por una Junta de Partes Interesadas compuesta por representantes de varios sectores de la industria alimentaria. Esta certificación ha sido reconocida por GFSI (Global Food Safety Initiative). Esto permite a sus clientes tener confianza en sus productos y asegurarse que tiene un riguroso sistema de seguridad.
El Sistema APPC, siglas de Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico, también se conoce como Sistema HACCP de sus siglas en inglés.
Este Sistema APPCC se trata de un procedimiento que posibilita la identificación, control evaluación de los peligros que se pueden producir y que actúan sobre la seguridad de los alimentos. Se emplea para por ejemplo, cumplir con los requisitos que establece una de las normas del ámbito alimentario más reconocida, como es la ISO 22000.
La Asociación de Minoristas Británicos en inglés British Retail Consortium (BRC), elaboró la BRC. La primera versión de la norma se desarrollo en el año 1998.
Se trata de una normativa del ámbito de la seguridad alimentaria y aporta el modelo para realizar la gestión de la seguridad, integridad, legalidad y calidad del producto.
Del mismo modo que no se puede comenzar la casa por el tejado, tampoco se puede pretender adoptar un sistema de seguridad alimentaria sin antes tener instauradas y consolidadas ciertas medidas y requisitos para mejorar la seguridad y calidad de los alimentos. Por eso, antes de poner en marcha todo el proceso para implantar en la empresa las disposiciones establecidas en la normativa ISO 22000 sobre inocuidad de los alimentos, es preciso asegurarse de que la organización cumple con los prerrequisitos necesarios.